El mero mero mero

Yo soy este, el de las piernas cutas cutas cutas
el moreno sabrosón, negro paqué mis tenis,
el trompudo barb'echivo, el necio concupicente,
mal cayente, cuestionante,
celoso mordido, tonto egoísta.

Yo soy el de las nalgas paradas paradas paradas
el de los ojos como los de su nana,
el de la sheca de su tata,
el del incesaestandarmóvil a más de 70,
el que dibuja y escribe, el que escribe lo que dibuja
el que escribe sobre lo que dibuja cuando escribe.

Yo soy el del café fuerte fuerte fuerte
sin azúcar, así amargo me gusta
con las ganas partidas por la mitad,
con imágenes perturbadoras en la morra,
con más de alguna palabra siempre en la boca,
con la pura gana de chingar a flor de piel.

Yo soy el que llega tarde tarde tarde,
al que todos tienen que esperar porque llega tarde
el mero inconsciente, el burlón y el carenalga,
el que batalla contra el mismo todos los viernes,
el que se desaparece cada vez que puede
para regresar con cara de chompipe el lunes
medio desvelado o desvelado y medio.

Yo soy el de los pretextos textos textos
el de las muladas hadas hadas
el de los blogs, el del twitter,
el Jorge Más irreparable:
el de la mera desesperación ambulante.

Ese soy yo... desqueriendo para siempre... 
dando vueltas... oxidado decadente,
buscando algún día cumplir mi macabro plan,
mi veintiúnico plan,
mi plan infinito:

estar completamente solo (con ella).

1 comentarios:

Abril dijo...

aaaaaaaa! cuando entro a visitarte siempre me quedo con la boca abierta....

De verdad vos, yo se que te lo he dicho muchas veces, pero que bien escribis!